Abuelo

- en Cultura, Firmas

Hoy te encontré en un rincón olvidado,

blanca e impoluta.

Esa visera diseñada para conducir.

Repleta de agujeros que hacen transpirar el aire.

Ligera y acompañada siempre de aquellos guantes elegantes de piel marrón,

perforados y cortados,

asomando tus blancos dedos.

Pilotar se convertía en un baile de disfraces.

Las plegables gafas de sol,

mitigaban esos ardientes rayos,

que traspasaban los cristales del mítico, clásico e inconfundible Seat Mirafiori.

Recordé aquellos días en los que el verano te devolvía a la infancia,

cuando era niña.

Cuando mamá hacía esa maravillosa tortilla, cortando pan de maravilla.

Observabas las manzanas verdes y brillantes,

y te ocultabas tras la sombra,

para que el sol no te hiciera daño ni deslumbrarte.

Te gustaba preguntar quién había venido,

y escuchar algo nuevo de aquel pueblo perdido.

Mientras nosotros jugábamos en el agua,

con las bicis y pistoleros en la montaña.

Aún éramos eternamente felices.

Eran los años 80, era un distinguido caballero, eras tú abuelo.

Autor

Escritora. Autora del poemario "ALMA"