Creencia

- en Firmas
ojo salamanca

No creo en una política que no dé y ponga en valor a las personas.

No creo en una política deshumanizada, donde el individuo, de forma particular y/o colectiva, no importe.

No creo en nada que no ponga en el centro a la persona.

Por lo tanto, estoy perdiendo la fe en muchas cosas. Pero, a pesar de todo, sigo en pie de guerra, luchando por lo que creo, aportando, unas veces más cansada que otras.

No todo vale.

No puede haber un acoso y derribo que todo lo justifique o que se justifique por un ansia de poder y de ocupar un trono que sólo beneficia a cuatro y que perjudica a la mayoría.

Me hierve la sangre cuando mienten a toda costa y se piensan que te la están metiendo doblada y que te vas a doblegar.

Se creen tan listos.

No puedo con la pasividad y con las pocas ganas de hacer que se maquillan en un todo por la patria envuelto en una bandera que, en realidad, manchan y pisotean.

Cualquier tiempo pasado fue pasado y quedó atrás, dejándonos unas líneas escritas en un grueso cuaderno para que no cometiéramos los mismos errores que nos llevaron a ser una sociedad famélica y enferma, donde había más gente fuera del país que dentro, más gente pidiendo que enriqueciéndose.

Creo en la humanidad que trabaja conjuntamente por conseguir mejores cosas para todas las personas, sin discriminación.

Creo en la bondad de las personas, aunque a veces se ponga cuesta arriba seguir manteniendo esta creencia.

Creo, porque si pierdo la fe o dejo de creer, estoy pérdida.

 

Recomendación literaria: “Fábula sobre la democracia”, poema de Marwan

Autor

Doctora en Derecho y Ciencias Sociales por la UNED, Licenciada en Derecho por la USAL, Máster en Derechos Humanos y Máster en Malos Tratos y Violencia de Género por la UNED. Técnica de proyectos en prevención y sensibilización en materia de igualdad, violencia de género y sexual.