Palabra de médico: Agujetas

- en Salud
Por qué correr

Sostiene la etimología popular que las agujetas se llaman así por el inconfundible dolor de la mialgia diferida, como de afiladas agujas que se nos clavaran en los músculos. De hecho, recuerdo haber estudiado durante la carrera una curiosa teoría patogénica según la cual el ácido láctico resultante de la actividad metabólica de los miocitos cristalizaría luego para formar microscópicas agujas intersticiales, causantes de los típicos pinchazos musculares de las agujetas.

Hoy, sin embargo, cuando la mayor parte de los investigadores atribuyen las agujetas a microrroturas de las fibras musculares causadas durante la práctica de un ejercicio físico excesivo o desacostumbrado, no se sostiene más la antigua etimología popular para las agujetas.

Nuestro paisano Francisco Cortés Gabaudan, helenista experto en etimología médica, propuso en el año 2011 otra explicación para el término que, en mi opinión, resulta bastante más creíble. Parte del hecho de que ‘agujeta’, para empezar, no es en español un diminutivo normal de ‘aguja’, pues incorpora el sufijo –eta de origen francés, provenzal o catalán.

La palabra procede, en efecto, del francés aiguillette, cuyo significado coincide con el primero documentado en español para ‘agujeta’: «correa o cinta con un herrete en cada punta, que sirve para sujetar ciertas prendas de vestir» (sentido este, por cierto, que aún conserva en Méjico). Apunta Cortés la posibilidad de que, a partir de ese sentido primitivo, ‘agujetas’ pasara a usarse en español, primero con el sentido de «objeto de poco valor o baratija», y luego con el de «propina que el que corría la posta daba al postillón», documentado ya en textos de Góngora y Tirso de Molina. A partir de ahí, el siguiente salto semántico —registrado en español a partir del siglo XVIII— consiste en usar ‘agujetas’ con el sentido actual de «dolor muscular tras un ejercicio al que uno no está acostumbrado».

En apoyo de su hipótesis, aduce el filólogo salmantino que la mayor parte de los ejemplos antiguos de la acepción médica de ‘agujetas’ mencionan expresamente el dolor muscular originado tras montar a caballo. Por ejemplo, en esta definición que daba el Diccionario de la RAE en 1770: «agujetas. Los dolores que se sienten en el cuerpo después de algún exercicio extraordinario o violento, como el de correr la posta, jugar a la pelota, etc.».

Si tenemos en cuenta que la función del postillón iba siempre unida a montar a caballo, que la propina dada al postillón se llamaba ‘agujetas’ en español al menos desde el siglo XVII, y que el postillón era tradicionalmente la persona más vinculada con el ejercicio de montar a caballo, parece comprensible que los dolores de montar a caballo que sufría una persona poco acostumbrada acabaran recibiendo en español el nombre de ‘agujetas’, en la idea, explica Cortés, «de que con las agujetas, en el sentido de ‘propina’, se intentaba recompensar al postillón de los dolores que uno tendría si hiciera su función».

Por Fernando A. Navarro, Traductor médico, Cabrerizos (Salamanca)

Revista Salamanca Médica 77, octubre-diciembre 2022.

Autor

El Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Salamanca, corporación de derecho público con casi 130 años de historia y más de 2.800 médicos de Salamanca, es el editor de la revista "Salamanca Médica", publicación de Medicina y Humanidades.