El testamento vital se utiliza para manifestar nuestros deseos sobre tratamientos médicos o cuidados futuros, si llegado el momento no disponemos de voluntad suficiente para manifestarlos. Esto quiere decir, que llegado el momento, no podemos comunicar nuestros deseos, como por ejemplo: recibir o no cuidados médicos o tratamientos específicos, si quieres donar tus órganos, si quieres someter tu cuerpo a tratamientos experimentales, si deseas ser enterrado o incinerado, etc.
Para poder otorgarlo, debes ser mayor de edad y hacerlo por escrito, además de estar en pleno uso de tus facultades mentales y otorgarlo libremente.
Debes saber que si tiempo después deseas modificarlo, sustituirlo o revocarlo, podrás hacerlo.