Está siendo la temporada más rara que recuerdo del Perfumerías Avenida. Mira que todavía me acuerdo de la llegada de los hermanos Recio para poner fin a la posibilidad de desaparición del equipo. Lo que no recuerdo es ya cuántos años hace de ello, pero son muchos. Son muchas temporadas en las que Perfumerías Avenida lleva regalando a la ciudad una locura y son muchos los millones de euros que una familia, de forma altruista ha puesto a disposición de los aficionados éxitos, ilusiones y alegría. Por eso, todo lo que está sucediendo este año me pilla por sorpresa. Cuando intento encontrar la explicación de algo, se produce otra situación nueva, extraña.
Sin embargo, acabo de ver fotos de la victoria de ayer en Bélgica y me doy cuenta que hay algo que no cambia. Aparece el presidente, Jorge Recio, con algunos aficionados y aparece sonriendo y, lo que es más importante, transmitiendo confianza.
La verdad es que Jorge Recio y sus hermanos son como una especie de padres. Siempre están ahí cuando hacen falta y esperemos que sigan muchos años, porque motivos para tomarse un respiro han tenido y están teniendo, sobre todo, esta temporada. Probablemente, haya cosas que no sepamos, pero también es cierto que, probablemente, no deban ser contadas. En esta situación, como en otras, hay que dejar pasar las cosas, trabajar con lo que tienes y no mirar hacia los lados. Hacer un camino. Y ese camino pasa por la Liga y por la Copa de la Reina, sin renunciar a disfrutar en Europa. Porque aunque hablamos de un campeón de Euroliga Femenina (que no se le olvide a nadie el logro porque a lo mejor no se vuelve a ver nunca) y varias veces subcampeón, la competición continental tiene que ser un regalo, un disfrute continuo y, si se puede ir avanzando, mejor, pero siempre con el disfrute como objetivo, porque siempre va a haber trasatlánticos con un mayor poder económico. Si no es en Rusia será en Turquía y si no en cualquier otro país. Avenida debe mantener su jerarquía en España, que no es nada fácil, y tiene que satisfacer a su afición, verdadero sentido del club, al igual que la afición tiene que estar al lado del equipo siempre, sin bajarse de ningún barco. El hastag #YoNomebajo utilizado por su responsable de prensa, Germán Rubio, hay que asumirlo hasta las últimas consecuencias. Si él, que es un crack, si Jorge Recio, verdadero alma mater, no se bajan, los demás no podemos hacerlo. A ese hastag hay que sumarle el “ni yo”, el “ni yo tampoco”, el “todos a una”.
Es el momento de saber lo que somos y donde estamos y, a partir de ahí centrarse en los objetivos. Será el camino más recto para conseguirlos. Es entretenido a veces concluir sobre situaciones que pasan. Es entretenido jugar a ser directores técnicos, pero esos puestos están ya ocupados. Dejemos que las cosas sigan su curso y no perdamos la perspectiva en ningún momento. Cada uno tendrá sus motivos para subirse al barco o no hacerlo, pero nosotros tenemos la obligación de estar al lado de aquellos que nos han hecho felices, de los que nunca nos han fallado, ni dentro ni fuera de la pista. Si ellos son cautos, nosotros debemos serlo más, si ellos no se bajan del barco, mayor motivo para coger cada uno su timón y poner rumbo al futuro. Al final unos van y otros vienen, pero la ciudad, el equipo y la gente siempre sigue, así que esa identificación no se puede perder nunca.
Se fue un técnico y llegó otro y, si el primero de ellos fue el mejor y nos llevó a cotas inalcanzables, ahora el mejor es el nuevo, y nos llevará donde nos tenga que llevar, pero siempre juntos. Se han ido jugadoras… pues han venido o vendrán otras. Todo lo demás será revolver y despistarnos de nuestro camino y eso es algo que no nos podemos permitir porque sabemos de dónde venimos y a dónde vamos. Parafraseando a Braulio Vázquez, director deportivo de Osasuna, cuando iban mal dadas a su equipo hace dos años: El barco lo pilota el capitán, que es Jorge Recio; el teniente es Pepe Vázquez; los oficiales son las jugadoras; y la tripulación el resto y el barco llegará a puerto o no, pero con el mismo capitán y si nos hundimos nos hundimos todos y si no, llegaremos a puerto, pero juntos.
Dos años después, Jagoba Arrasate sigue siendo el capitán del barco ‘rojillo’. El equipo navarro está en semifinales de la Copa del Rey y es séptimo en Liga en la que será una de las mejores temporadas de su historia.
Así que ya lo saben. Todos juntos y a muerte.
#YoNOMEBAJO