Con motivo de la celebración del Día Internacional del Orgullo Juventudes Socialistas de Salamanca organizaba un acto, en la sede provincial del PSOE de Salamanca, donde era presentado el libro “El infierno penal de los homosexuales durante el franquismo”, una obra colectiva coordinada por el profesor asociado de Derecho Penal en la Universidad de Salamanca, Julio Fernández García, presente en dicho acto, y que contó a su vez con la participación de los secretarios de Memoria Democrática y de Diversidad LGTBI y Movimientos Sociales de los jóvenes socialistas salmantinos Cristina Fernández y Álvaro Hernández respectivamente.
Una charla-coloquio donde se quiso unificar “Memoria y Orgullo” en torno a la disertación sobre una obra, que estará disponible en las librerías a partir de la semana que viene, que recopila documentos muy importantes sobre la situación vivida por numerosas personas recluidas por su condición sexual en la colonia agrícola de Tefía en Fuerteventura. Un centro penitenciario, “o más bien un campo de concentración franquista” según expusieron algunos de los ponentes que servía para el encarcelamiento de presos comunes y políticos así como lo que el régimen de la dictadura llamaba la reeducación de homosexuales varones
En otras muchas cuestiones, el acto sirvió para poner de manifiesto la importancia de una Democracia “que no caiga en el olvido”, y por eso, expuso el profesor Julio Fernández, “estos libros y estos estudios son necesarios para reparar y no repetir las atrocidades anteriores”, argumentos en los que también insistió Álvaro Hernández, secretario de diversidad LGTBI+ y movimientos sociales manifestando que “las Democracias sanas no se pueden construir a través del olvido, sino que debe haber necesariamente un aprendizaje y una reparación hacia los colectivos que hayan sufrido”
Cristina Fernández, secretaria de Memoria Democrática en las Juventudes Socialistas aprovechó su intervención para acusar de homofobia al vicepresidente de la Comunidad Autónoma de Castilla y León en base a sus declaraciones en las que afirmaba, según recordó la joven socialista “que el problema de la despoblación era consecuencia o estaba vinculado con la excesiva sexualidad”
Como conclusiones generales, varios de los asistentes entre el público y los ponentes encargados de la presentación del libro, coincidieron en la necesidad que todavía “sigue existiendo” en Castilla y León para cuidar y proteger al colectivo LGTBI a través de la aprobación de una ley con carácter autonómico, “una ley que incluya a todos y cada una de las personas que compone este colectivo” tras acusar al actual ejecutivo regional “de poner en marcha una involución política en esta materia en toda la Comunidad contra la que nadie debe quedar impasible”
Desde Juventudes Socialistas de Salamanca se ha querido con este acto “denunciar todas las tropelías a las que el colectivo se enfrenta a diario, desde la discriminación hasta el bullying, pasando también por la violencia que se ejerce no solo desde diferentes grupos sino también desde las instituciones”.
Y por todo ello, han concluido, «el día del orgullo es una reivindicación, una lucha por quienes somos”
