- La Cámara autonómica se suma a numerosos ayuntamientos y a otras instituciones y particulares para su mantenimiento
La Comisión de Presidencia de las Cortes de Castilla y León ha aprobado por unanimidad una Proposición no de Ley del Grupo Socialista, dirigida a la Nunciatura Apostólica en España y a la Conferencia Episcopal, en la que se pide el mantenimiento de la centenaria Diócesis Civitatense y, en consecuencia, seguir contando con un obispo titular exclusivo y residencial.
De esta forma, la Cámara autonómica se suma a numerosos ayuntamientos de la Diócesis de Ciudad Rodrigo, como a otras instituciones y particulares, en defensa de su mantenimiento.
El proponente de la Proposición no de Ley, José Ignacio Martín Benito, gran conocedor de la historia tanto de Ciudad Rodrigo como de la Diócesis, ha sido el encargado de defender esta iniciativa, exponiendo las vicisitudes que ha pasado la Diócesis en los últimos 170 años, desde el Concordato de 1.851 hasta la situación actual con la espada de Damocles sobre su posible suspensión o el nombramiento de un Obispo Común para Salamanca y Ciudad Rodrigo.
Martín Benito ha justificado la necesidad de la propuesta explicando las consecuencias de esta pérdida, que va más allá de cuestiones religiosas o eclesiásticas, con el objetivo de mantener y defender una seña de identidad del oeste salmantino, con su capital Ciudad Rodrigo, como principal damnificado.
El procurador socialista ha agradecido la compresión de los grupos parlamentarios Popular, Ciudadanos y Mixto (en este caso UPL), en defensa del estatus jurídico de la Diócesis de Ciudad Rodrigo, con su voto positivo.
Por su parte, el procurador salmantino y secretario general del PSOE de Ciudad Rodrigo, Juan Luis Cepa, ha apuntado que esta resolución de las Cortes de Castilla y León «no va contra nadie, sino a favor de una institución secular, que ha marcado el devenir histórico, económico y cultural del oeste salmantino y, principalmente, lo que conocemos como la comarca de Ciudad Rodrigo, tras agradecer también a su vez el apoyo unánime de las Cortes y, especialmente, a todas aquellas personas e instituciones que están trabajando en este mismo fin».
