- Luis Ángel González, director gerente, Fernando de la Iglesia, director de Gestión y Servicios Generales, y Jesús Gutiérrez, subdirector de gestión, de Ingeniería y Mantenimiento, presentan las líneas de actuación en materia de eficiencia energética que se llevarán a cabo en el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca los próximos meses, centradas siempre en el desarrollo sostenible.
El Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA) tendrá su propio “Plan de Ahorro Energético” con el que se busca una mayor eficiencia en la materia en todas las infraestructuras que lo conforman, para el que se necesita la colaboración de todos los trabajadores y que está centrado en el desarrollo sostenible conjugando tres aspectos: ambiental, económico y social.
El director gerente, Luis Ángel González Fernández, lo presenta hoy, junto con el director de Gestión y Servicios Generales, Fernando de la Iglesia Ruiz, y el subdirector de Ingeniería y Mantenimiento, Jesús Gutiérrez Segovia, subdirector de gestión, de Ingeniería y Mantenimiento.
El objetivo de este “Plan de Ahorro Energético” es adoptar un conjunto de medidas de ahorro tendentes a conseguir una reducción del consumo actual de entre un 20% y un 25 % a medio plazo. Para ello, se pretende focalizar en medidas de ahorro energético formuladas atendiendo a varios factores claves: 1) que tengan un efecto significativo en la reducción del consumo de energía, priorizando aquellas que resulten más efectivas; 2) que no afecten a la actividad sanitaria y al cumplimiento de sus fines, y 3) que mantengan plenamente el desempeño de la actividad
investigadora del centro. Se ha creado un grupo de trabajo principal y multidisciplinar, con reuniones periódicas y seguimiento de las acciones inicialmente planteadas y se propone que se analice de forma periódica su efectividad, pudiendo establecerse nuevas medidas de ahorro o modificar las propuestas en atención al cumplimiento de los objetivos planteados.
Las medidas iniciales se moverán en tres ejes: medidas para reducir la dependencia de los combustibles fósiles; medidas de eficiencia energética en los edificios del CAUSA, y medidas de formación, sensibilización y difusión.
El plan comienza a ponerse en práctica desde este invierno, empezando por pequeñas acciones, pero de suma importancia, como la concienciación, así como acciones de mayor envergadura, siempre orientadas a los ejes anteriores, como: la instalación de puntos de recarga de automóviles eléctricos e híbridos; proyecto de instalación de paneles fotovoltaicos y térmicos; la sustitución de equipos de climatización y refrigeración obsoletos; actuaciones en la envolvente térmica de los edificios; mejoras en la instalación de iluminación, en los aparatos elevadores y en el equipamiento ofimático, así como la implantación de auditorías energéticas.