Los hermanos Jerónimo, Luis y Raúl Méndez López forman parte de la tercera generación familiar de artesanos filigranistas. Siguen la estela de su abuelo, que fundó su taller en 1928 en Tamames (Salamanca) y aprendieron el oficio con su padre y maestro Luis Méndez Vieira. Su trabajo muestra y difunde las posibilidades de esta antigua técnica aplicándola tanto en los modelos clásicoscomo en creaciones contemporáneas. Sus obras tienen un notable reconocimiento tanto a nivel nacional como internacional. Actualmente, con el nombre comercial de Luis Méndez Artesanos son un referente en cuanto a la recuperación de la técnica de filigrana para la joyería contemporánea.
El Patrimonio Cultural Inmaterial y el Arte Contemporáneo comparten un mismo espacio, en su punto de venta, la Galería Luis Méndez, desde la que promueven el arte y la artesanía preservando las técnicas artesanales con planteamientos actuales. En la actualidad, la Galería Luis Méndez es un punto esencial de promoción cultural ubicado en pleno casco antiguo de Salamanca, en la calle Meléndez.
¿Cuáles son los orígenes de tu vocación?
Yo he crecido en un taller familiar, jugaba con las herramientas. Empecé a trabajar con catorce años. Siempre he tenido una vena creativa, que desde muy joven empecé a desarrollar respecto a las posibilidades que tiene la filigrana, las posibilidades de creación que tiene la técnica. Por suerte, siempre me he movido en un ambiente creativo, en cuanto a amigos, familiares… Uno de mis hermanos estudió bellas artes. Todo esto, junto con mi inquietud, ha potenciado nuestro trabajo. De ahí surgen todos los proyectos que hemos desarrollado y las diferentes líneas en que trabajamos ahora mismo.
Actualmente, yo gestiono la galería, pero el taller lo llevan mis hermanos Raúl y Jerónimo, que son los que se encargan, básicamente, de la producción. Yo colaboro en los aspectos de diseño, realizo algunas piezas únicas y llevo todo el tema que tiene que ver con ferias tanto a nivel nacional como internacional
¿Cuáles son los puntos que tienen en común la artesanía y el arte?
Es un debate un poco complejo. Si tú elaboras una pieza con la intención de transmitir un mensaje o provocar una sensación, una emoción, ya estás haciendo arte. Si estás elaborando piezas con un sentido estético o de adorno, entraríamos en el campo de la artesanía.
La artesanía no deja de ser un modo de expresión, ¿no?
Claro, es un modo de expresión, y forma parte de nuestra identidad. Al trabajar con una técnica como la filigrana, las influencias se remontan a miles de años de historia y todo esto es muy interesante. También, descubres las conexiones culturales y las influencias que tenemos de civilizaciones antiguas. Esto enriquece y da profundidad al trabajo, si lo intentas desarrollar con seriedad.
Las joyas que tú elaboras son, de alguna manera, obras de arte…
Cuando empecé a viajar a EEUU, al Reino Unido… me decían: “no te presentes como un artesano, preséntate como un artista, porque aquí a las personas que hacen lo que haces tú se las considera artistas”. En muchas ocasiones, el dominio de una técnica o la exquisitez de un trabajo artesanal, en algunos lugares lo pueden considerar arte. Yo creo que aquí está muy clara la línea entre el arte y la artesanía. Tu trabajo debe transmitir una idea, un mensaje, que sea algo que resulte emocionante. Si a alguien le resulta emocionante, el trabajo y la destreza técnica, o el derroche de calidad en el trabajo… encantado de que me consideren artista.
Vosotros le dais a vuestras obras una mezcla de tradición y a la vez innovación, un toque de vanguardia…
Claro sí. Fue uno de nuestros primeros objetivos, porque la filigrana siempre ha estado relacionada con el folclore, con la estética tradicional, son joyas populares, joyas que utilizaba la gente normal, por decirlo de algún modo. En otras épocas, en el siglo XVII, XVIII, estas eran las joyas de la corte, las joyas de la nobleza. La técnica de la filigrana favorece elaborar estas joyas de un modo más barato. Actualmente la mano de obra tiene mucho valor, y desde el primer momento tratamos de hacer joyas de filigrana con un diseño contemporáneo, con las mismas exigencias técnicas que puede tener la joyería de cualquier marca. Fue nuestro principal objetivo: Incorporar la técnica de la filigrana a la joyería contemporánea.
¿Cómo describirías la técnica de filigrana?
La técnica de filigrana consiste en elaborar joyas a base de estructuras de hilo.
Tenéis también un papel en la docencia…
Estamos impartiendo cursos sobre la técnica de filigrana en diferentes escuelas de arte y artesanía. He impartido cursos en Madrid, en Valladolid, en Bogotá… Creo que es muy importante que estas técnicas se utilicen en un plano contemporáneo, que continúen vivas y sigan aportando identidad a nuestras producciones.
¿Cuántas exposiciones habéis organizado?
Muchas, no te sabría decir ahora mismo. Tenemos un currículum bastante extenso en exposiciones de arte en la galería, muchas de ellas comisariadas por Ricardo Núñez. En etapas anteriores yo coordinaba las exposiciones. Hemos organizado exposiciones dentro y fuera de España, ya centradas en nuestro trabajo.
Tienes numerosos premios. ¿Cuál es el que mayor satisfacción te ha reportado?
El más importante es el Premio Nacional de Artesanía que nos dieron en 2015 en la categoría producto, es el mejor producto artesanal del año. Son unos premios que otorga el Ministerio de Industria. Nos lo dieron por una pieza que se titula el Jardín, que está inspirada en un relicario leonés del siglo XVIII. Este año hemos quedado finalistas en el premio Promociona, en los Premios Nacionales de Artesanía. Este premio valora actividades dentro del sector que pongan en valor ciertas facetas del negocio artesano: puede ser desarrollo de productos, exposiciones, proyectos, talleres… Este año valoraron nuestra propuesta de presentar la filigrana, una técnica que pertenece al Patrimonio Cultural Inmaterial, como algo contemporáneo, promocionarla junto a exposiciones de arte y generar un espacio dinámico en el que se potencien estas facetas artísticas de la artesanía.
¿Qué te aporta la faceta de galerista?
Me aporta lo que la idea original del espacio había concebido, que era conseguir ese intercambio de artistas y artesanos. Me aporta esa energía que tiene la creatividad. Desde luego nunca hemos trabajado como unos artesanos que elaboran piezas exclusivamente como artículos que se van a vender. Siempre hemos trabajado con un criterio propio, para desarrollar un producto con unas características especificas de calidad, de diseño etc…. aunque estemos enmarcados en una técnica tradicional como es la filigrana. Desde nuestro espacio, la idea fue siempre destacar los aspectos artísticos que tiene la joyería y al mismo tiempo destacar los aspectos artesanales que tiene el arte. Buscar esa sinergia entre el arte y la artesanía para que las dos facetas quedaran potenciadas. Resulta muy gratificante promocionar la obra artística contemporánea de los diferentes artistas que exponen en nuestro espacio.
¿Qué tal va la exposición ’21g 36h’?
Va genial, estamos recibiendo muchas visitas, realizando algunas ventas. Estoy muy contento, muy agradecido a Sucri, y al colectivo artístico El Cuchitril, por haber elegido el tema de la filigrana. Para mí fue una sorpresa y creo que va muy en la línea de nuestro espacio. Las obras son fantásticas y todos los artistas se han implicado con mucha ilusión en el proyecto. Para mí es emocionante
¿Cuáles son tus proyectos de futuro?
Seguir trabajando en la galería en la misma línea que estamos haciendo ahora, organizando exposiciones de arte contemporáneo, seguir desarrollando nuestras diferentes líneas de trabajo, y buscando esas sinergias y colaboraciones, que nos pueden enriquecer a todos, como la exposición ’21g 36h’. Me parece fundamental esta actitud de colaboración, de apertura, para que las cosas sigan avanzando.
