- Desde Savia Salamanca y el proyecto LIFE Vía de la Plata se ha realizado un audiovisual en el que el biólogo Raúl de Tapia explica distintos tipos de especies vegetales exóticas y/o invasoras que atentan contra la fauna local y cómo controlar su propagación
- El experto destaca que una jardinería adecuada como la que se viene realizando en Salamanca en los últimos año es clave para evitar la expansión de estas especies
Los parques y jardines de Salamanca, así como los rincones vegetales creados en los domicilios en forma de balcones, ventanas o terrazas, son elementos fundamentales para la construcción de la infraestructura verde de la ciudad, que genera importantes beneficios para la salud urbana. Pero las plantas utilizadas en estos rincones pueden extender sus semillas a través de elementos naturales como el agua, el viento o la acción de los animales y acaban posándose y proliferando en espacios que no les corresponden, como los bosques y las riberas del Tormes, causando un importante perjuicio a los árboles o plantas que son propias del lugar.
Para concienciar y formar a la ciudadanía al respecto y capacitarles para elegir las especies más adecuadas para poder generar sus espacios verdes, el Ayuntamiento de Salamanca, a través de su Estrategia de Infraestructura Verde, Savia, y del proyecto LIFE Vía de la Plata, ha generado un audiovisual en el que el biólogo Raúl de Tapia, director de la Fundación Tormes EB, recorre distintos enclaves de la ciudad explicando las especies vegetales invasoras más habituales, las consecuencias de esta colonización y cómo evitarlas.
En el vídeo, que puede consultarte a través del canal de Youtube de Savia Red Verde a través del enlace , Raúl de Tapia se centra de forma especial en las especies la retana de olor, la falsa acacia y la madreselva, muy presentes en los diseños de jardines ornamentales décadas atrás y que han ido proliferando de manera considerable en las riberas del Tormes, en espacios que no les son propios.
En primer lugar, la retana de olor es una planta con un gran aroma, que ocupa grandes superficies una vez que ha salido de su entorno original. Por efecto de la acción de las aves, que transportan sus semillas, esta planta tiene gran presencia en la ribera del río, donde se comporta como invasora de otras especies propias del lugar como los saúcos, majuelos o endrinos salvajes. El biólogo salmantino explica que se lleva luchando con esta especie más de 20 años en este entorno, en el que provoca un gran impacto contra la flora autóctona. A pesar de tratarse de una planta de origen nacional, en este entorno se comporta como colonizadora y es necesario controlar su presencia en este y otros lugares como bordes de caminos ya que, además, son tóxicas y pueden causar daño al ganado.
Otra de las especies analizadas es la falsa acacia, un árbol originario de Estados Unidos que fue muy utilizado en la jardinería de hace 60-70 años y que produce mucha semilla, lo que permite una gran proliferación. Su amplia presencia en espacios de bosque y ribera debe ser controlada, ya que atenta contra el arbolado propio de esas zonas como los olmos, fresnos o sauces, quitándoles recursos, lo que deriva en una pérdida de patrimonio natural que es necesario evitar.
La madreselva es la última de las especies presentes en este vídeo, donde se muestran las consecuencias sufridas cuando esta planta trepadora se asilvestra y cubre grandes extensiones de terreno, ocupando el escenario natural de sauces o chopos a los que va quitando luz y termina secando. De Tapia resalta la importancia de mantener esta especie en entornos de jardín y destaca el ejemplo del muro de la muralla bajo el Huerto de Calixto y Melibea, donde un ejemplar de madreselva, con los cuidados apropiados, aporta gran belleza y beneficios para los ecosistemas urbanos.
Para finalizar, el experto destaca la labor actual que se desarrolla en el diseño y cuidado de los espacios verdes públicos de Salamanca, donde el Ayuntamiento de la ciudad aplica una estrategia bajo criterios Savia, creando zonas verdes más funcionales, que generen beneficios para la ciudadanía. Así, son lugares de encuentro, disfrute y actividad al aire libre por parte de la ciudadanía y también fomentan la biodiversidad y la presencia de especies animales beneficiosas, favoreciendo un entorno urbano renaturalizado.
