Los recientes temporales de viento, nieve y lluvia extrema han dejado una huella devastadora en nuestros bosques y ríos, acumulando árboles y arbustos caídos que representan un grave riesgo para la propagación de incendios en verano y la intensificación de DANAs en invierno. Con estos precedentes, la inacción ante esta crisis es inaceptable.
Cifras alarmantes:
En España y según los datos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), en los últimos años se ha observado un aumento significativo de la mortalidad de árboles, especialmente en zonas afectadas por sequías y temporales. Se estima que millones de árboles han resultado dañados o muertos, lo que supone un incremento del riesgo de incendios y la pérdida de biodiversidad.
Los temporales recientes han provocado la caída de miles de árboles en diversas regiones, obstruyendo cauces de ríos y aumentando el riesgo de inundaciones en toda España.
A nivel europeo, los informes del European Forest Institute (EFI) alertan sobre el aumento de los daños forestales causados por eventos climáticos extremos. Se estima que millones de hectáreas de bosques han sido afectadas en los últimos años.
Los daños forestales en España y en Europa no solo incrementan el riesgo de incendios e inundaciones con graves daños para las vidas humanas, sino que también reducen la capacidad de los bosques para absorber CO2, agravando el cambio climático.
La biomasa, un recurso desperdiciado:
La ingente cantidad de madera resultante de estos temporales y climas extremos, lejos de ser un desecho, representa un valioso recurso.
La Fundación Madrina propone que esta biomasa se destine a familias en situación de pobreza energética, como las de Cañada Real, en lugar de ser eliminada en plantas de residuos como Valdemingómez, entre otras a lo largo de la geografía española.
Esta medida no solo aliviaría la situación de vulnerabilidad de estas familias, sino que también contribuiría a la economía circular y a la reducción de emisiones de CO2.
Es importante resaltar, que esta biomasa puede servir para la industria, como la creación de pellets, o para la creación de tableros de madera.
Llamamiento a la limpieza de ríos y bosques:
La entidad exige una limpieza urgente y sistemática de nuestros bosques y ríos para prevenir riesgos mayores.
Instamos a los ayuntamientos y administraciones competentes a gestionar adecuadamente esta biomasa destruida, aprovechando su potencial como fuente de energía renovable.
Demandamos la creación de puestos de trabajo en la España rural para llevar a cabo estas tareas de limpieza y gestión forestal, impulsando así el desarrollo económico de estas zonas.
Es importante que haya una coordinación entre las diferentes administraciones, para que los planes de gestión forestal, sean eficientes, y se puedan llevar a cabo de manera periódica.
La salud de nuestros bosques y ríos es crucial para nuestro futuro. No podemos permitir que la inacción nos conduzca a un desastre ambiental y humano.