Expertos y representantes de las principales entidades y administraciones que trabajan para ahondar en los problemas de las personas sordas y mejorar su capacidad auditiva para lograr su total integración en la sociedad, han coincidido en que los principales retos a los que se enfrentan es abordar esta discapacidad desde un punto de vista multidisciplinar implicando a todos los sectores, sanitario y social, para facilitar la inclusión total del colectivo.
Así se ha puesto de manifiesto en la mesa redonda celebrada esta mañana en El Tormes, organizada por la Asociación de Padres de Niños Sordos de Salamanca (ASPAS) con la colaboración del programa de Empresas Amigas de la Universidad de Salamanca, la Junta de Castilla y León y el propio Centro Comercial para mostrar un tipo de discapacidad habitual pero todavía “invisible”.
Otorrinos, logopedas, psicólogos y los profesionales especializados en audición han mostrado su compenetración sobre la necesidad de conciencia y educación social y la carencia de recursos (personales y económicos) que siguen existiendo y que obstaculizan la comunicación en la vida diaria de las personas sordas. “No somos conscientes de la importancia de la salud auditiva y la repercusión que puede tener una hipoacusia en el día a día”, ha reconocido el jefe del Servicio de Otorrino Pediátrica del Complejo Universitario de Salamanca, Fernando Benito González.
La importancia del diagnóstico precoz ha sido otro de los aspectos expuestos por los ponentes para dar visibilidad a los niños sordos y facilitar su acceso a la audición. Para ello, aunque con el avance tecnológico se van desarrollando más técnicas y herramientas para reducir los obstáculos a los que se enfrentan, los expertos han reconocido “la importancia del apoyo familiar y social del entorno del niño para facilitar su integración y evitar trastornos secundarios en su desarrollo personal”, ha insistido Felicísimo Jiménez Fernández, pedagogo del Servicio de Atención Temprana de la Unidad de Valoración a Personas con Discapacidad Auditiva.
En este sentido, han demandado una mayor dotación de medios y profesionales con formación específica en los colegios para eliminar los obstáculos a los que se enfrentan los alumnos con discapacidad auditiva en las aulas, como logopedas, traductores de lengua de signos o micrófono remoto, entre otros.
El principal reto para lograr la integración total de las personas sordas es incidir en la educación de la sociedad para que las entiendan. Además, dotar de más medios personales, técnicos y económicos, será la clave principal para eliminar las barreras comunicativas que provocan aislamiento y falta de relación con los demás, que constituyen la principal limitación de las personas sordas en el día a día.
