Decía José Ortega y Gasset que «La historia del toreo está ligada a la de España, tanto que sin conocer la primera, resulta imposible comprender la segunda», he aquí la clave fundamental para comprender la tauromaquia que más que defenderla hay que enseñarla desde niño, en los colegios e institutos con el objetivo de inculcar los valores del mundo del toro a los más jóvenes.
Los jóvenes no necesitan bonos culturales, necesitan dosis de educación taurina desde su juventud, para saber qué las corridas de toros son una parte fundamental del panorama cultural, social y económico de nuestro país. En este mundo moderno podemos aceptar que maten a un animal tras muros cerrados, después de vivir una vida indigna, sin conocer la luz del sol y llenos de hormonas pero parece crueldad dejar vivir a un animal en campos abiertos durante cuatro años y darle la oportunidad de defenderse y morir de pie en un ruedo. Nadie tiene el derecho de dar la muerte a un animal sin jugarse en ello su propia vida.
La raíz de la Fiesta es la juventud, la cual no tiene noticias de la grandeza del toreo, de la verdad que supone el enfrentamiento entre el toro y el torero. La mayoría de los jóvenes están aislados de los toros. Solo quienes por influencia familiar, o por descubrimiento ocasional, conocen los secretos de la tauromaquia pueden ser los aficionados de los años venideros. Y ese número es más bien escaso. Este es uno de los grandes problemas que vislumbramos allá por el 2015, año en el que se fundó nuestra asociación, Juventud Taurina de Salamanca, cuando cuatro jóvenes ilusos, decidimos dedicar nuestro trabajo y nuestro dinero para fundar una asociación que supuso un revulsivo en nuestra ciudad, pasados siete años, ahora ya no somos cuatro jóvenes somos más de 500 socios que hemos constituido una asociación referente a nivel nacional, haciendo historia al vender los 500 abonos en grada de sol facilitados por la empresa gerente de la plaza de toros de Salamanca, BMF.
Como no puede ser de otra manera, desde aquí mi agradecimiento en nombre de la directiva de JTS. Salamanca es tierra de toros, toreros y, por supuesto, de juventud taurina, por eso señores empresarios y seguridad, dejad que los jóvenes llenen los tendidos, no los echéis de ellos, ni mucho menos de la plaza, fomentemos los valores de la tauromaquia entre los más jóvenes, porque sembrar la tauromaquia, no solo es un derecho, sino un deber que es cosa de todos. Me despido de ustedes no sin antes desearles una gran tarde de toros, que disfruten y sobre todo deseándoles que sigan siendo felices.
Rubén Gudino – Revista Lances de pluma y pincel – 18 de septiembre de 2022.
