Si es que es simplemente eso, lo del domingo. Ese pim, pam, pum, ese zas, ese imponer la lógica. Cuando eres superior tienes que demostrarlo y es lo que hizo el Salamanca UDS ante el Laguna. Por eso, el nivel de exigencia que venimos manteniendo desde el primer día es máximo, porque el Salamanca UDS tiene futbolistas para hacer lo que hizo en el Helmántico, y todavía más. Y, de esa forma, ser primero con diferencia y salir, de una vez por todas, del pozo en que lleva metido ya hace tiempo. Como siempre he dicho, un equipo con esa camiseta, con ese escudo y en ese estadio no puede estar en una categoría regional.
Y eso que faltaba todavía algún ‘capo’ y eso que había cambios respecto a partidos anteriores, y eso que alguno tampoco tuvo su día, pero así es el fútbol, un deporte de equipo, y de esa forma tiene que estar hecho este Salamanca UDS, cuando uno no tiene su mejor partido, no tiene por qué notarse, porque el resto de compañeros suple ese obstáculo.
Lo comentábamos en la grada. Este equipo tiene capacidad para encarrilar los partidos en una hora de juego. Y entonces sí es cuando los jóvenes, la ‘segunda línea’ tiene que coger los minutos y la experiencia. Esos jóvenes por los que el club ha apostado, no pueden ni deben ser sólo un número para completar la convocatoria. Al final de la Liga tienen que ser ya juez y parte y eso se hace disputando minutos y si el equipo no está bien, probablemente sean otros futbolistas los que asuman esa responsabilidad y les restaría minutos y capacidad para aprender.
Además, sigue la ‘dispersión’ goleadora. Importante, sobre todo, que Alvarito, probablemente el mejor futbolista de la pasada temporada, fuera titular y es positivo que marcara y la forma en la que lo hizo, casi en el primer balón. Este futbolista tiene el ‘colmillo afilado’ y lo demuestra cada vez que salta al campo. Sabe y aporta. Personalmente me habría gustado que hubiera metido su ‘golito’ Fassani, que fue de más a menos y lo vi cansado al finalizar, probablemente, por la falta de regularidad en la pretemporada. Pero tiene hechuras y saber estar y eso es importante. Ahora hace falta que tenga la continuidad y se ponga al cien por cien físicamente, porque tiene que estar llamado a ser un jugador desequilibrante y su aportación será vital para el equipo, aunque ya he escrito más de una ocasión que, con los futbolistas de ‘segunda línea’ que tiene este equipo, el gol no me preocupa.
Y, aunque no me gusta personificar, qué importante son futbolistas que sientan al equipo. Qué importante ese Caramelo que lo buscó y lo intentó, aunque no fuera su mejor partido, pero es un futbolista que lo da todo, que es muy querido por la gente de la grada y que se identifica con el escudo que lleva en el pecho. Y qué lujo tener futbolistas como Cristeto, que, teniendo nivel muy superior, después de varios años quedándose con las ganas, ha regresado también a su casa. Lo da todo y tiene mucho. Tiene calidad y, además, se vacía.
Importante para que ese idilio con esa afición siga, para que los abonados sigan creciendo y eso, aunque ya no lo digamos, no deja de ser una locura. El club anunciaba la pasada semana más de 5.800 y, a este ritmo, superarán los 6.000. Es el momento de que el equipo siga con esa velocidad de crucero que parece haber cogido, la que pedíamos hace unos días. Parece que nos hubieran leído y se hubieran puesto manos a la obra. Ahora hay que seguir llevando el timón de la categoría, siempre hacia adelante, dejando que el viento de popa les lleve hacia un ascenso soñado y deseado. Ahora esperemos que sea también merecido y conseguido, aunque para ello, todavía quedan unos cuantos mares que surcar.