Si algo me ha enseñado la pandemia por el coronavirus que estamos padeciendo desde hace 11 meses, es que cumplir años es un regalo en sí mismo.
Yo acepto con humildad este regalo que es seguir viviendo, aunque sospecho que algo tendré que dar a cambio a los demás para equilibrar la posible injusticia de que otros hayan muerto por su causa y yo no. Y ya van contabilizados de forma oficial, solo en nuestro país, 68.000 personas a día de hoy. DEP.
Porque ese sentido trascendente de la vida que tanto he buscado, que tanto busco, espero tenga que ver con la entrega generosa a cuantos me rodean en las distintas esferas de intimidad, único nivel donde yo puedo tener algo de influencia.
Constato emocionada en este momento de mi vida, que de un plumazo me ha abandonado la sombra de tristeza que nublaba mi mirada por el encierro y sus consecuencias en los aspectos sanitario, profesional, económico, físico y mental.
Haber superado la COVID-19 me ha hecho conocerme mejor a mí misma, vencer mis miedos, aferrarme a mis seres queridos, reconocer mis debilidades, volver a sentirme vulnerable como aquella niña asmática que hace muchos años fui, y me ha dado tranquilidad para seguir afrontando el tiempo que resta de confinamiento, hasta que por fin podamos entre todos dar por superada la enfermedad sin temores, para volver a vivir en plenitud.
Para mí, el mejor regalo de cumpleaños es poder contarlo, sentir que he renacido limpia y pletórica de energía, ilusionada ante el futuro que preveo nos conducirá a una vida más sana, equitativa y solidaria.
Muchas gracias a todos cuantos al leer estas líneas me mandéis vuestras felicitaciones. Nunca como hasta ahora había constatado el poder sanador de unas palabras amables, porque desde que era niña nunca había sentido la enfermedad tan cercana.
Muchas gracias a mi familia, amigos del alma, compañeras del colegio, colegas de profesión, compañeros del equipo Team Run&Go, corredores, vecinas, pacientes, conocidos, amigos de las redes sociales, porque sois el soporte de mi vida. Saber que os tengo me da paz y seguridad.
Ojalá éste sea el año del renacer. Yo voy a poner de mi parte todo el ímpetu de mi carácter combativo y luchador. Cuento con todos.
