La economía de la atención

- en Firmas
Mindfulness

Si hay un valor en alza hoy ese es TU ATENCIÓN. Sin que te percates cientos de empresas y grupos de interés quieren captar tu atención para comunicar su mensaje y provocar una acción deliberada como comprar o vender, o, un pensamiento, una ideología, con el fin de influirte.

Tu atención hoy vale más que nunca.

¿A qué le prestas atención? ¿A qué le presta su atención la mayoría de la gente?

Si no hay dolor o sufrimiento en tu vida, tu atención está casi siempre ocupada con tus pensamientos y sentimientos. Un patrimonio muy voluble y cambiante al que todos los días le prestamos una atención casi exclusiva.

La atención evolucionó en la historia. Desde la ALERTA, de las fases más primitivas, a la OBSERVACIÓN del animal atento a su entorno, el ANÁLISIS gracias a la memoria, al DISCERNIMIENTO con una mente moderna y actual.

La ECONOMÍA DE LA ATENCIÓN se podría definir como la gestión de los recursos cognitivos y volivitos en las fases de alerta, observación, análisis y discernimiento con el fin de estar presentes en la vida de manera plena y desde ahí tomar decisiones libres y conscientes.

Si el objetivo de la ECONOMÍA DE LA ATENCIÓN es ESTAR PRESENTE en la vida, poner en práctica herramientas y estrategias para lograrlo se está convirtiendo en una necesidad para el desarrollo humano dado el nivel de estímulos externos a los que nos vemos sometidos diariamente nada más levantarnos de la cama.

Un ejemplo de aplicación práctica de la Economía de la Atención es el Mindfulness y todo lo que le rodea.

Hoy vamos a realizar una exposición de su aplicabilidad a un colectivo muy necesitado de atención: LOS ADOLESCENTES.

¿A qué le prestan atención los adolescentes?

“Paso palabra”

Mejorar el nivel de atención en los adolescentes pasa por reconocer que su nivel de compromiso con hábitos y costumbres depende de una pregunta:

¿Está de moda?

Mindfulness está de moda entre los adultos, pero no logra penetrar entre los adolescentes porque el enfoque no discrimina a ambos colectivos.

Para enfocar de manera adecuada la transferencia del valor que lleva aparejada la práctica del Mindfulness como herramienta eficaz de la Economía de la Atención hemos de tener presente algunas de sus peculiaridades:

  • Los adolescentes se mueven en grupos.
  • Son nativos digitales.
  • Buscan nuevas experiencias.

Con estos mimbres podemos hacer algún cesto para lograr su atención.

Organizar en los Colegios, Asociaciones y Campamentos juveniles jornadas de práctica y aprendizaje de Mindfulness. Es decir, implicar al Grupo en su práctica. No plantearlo como práctica individual. De esta manera vivirán una experiencia para ellos gratificante que podrán compartir con sus colegas.

Como nativos digitales pudiera pensarse que todo lo lo on line les apasiona. Y así es, por tanto, el formato de comunicación de contenidos debe ser preferentemente el digital. Y ahí se pueden programar píldoras formativas muy enfocadas a la solución de problemas mediante el aporte de soluciones concretas y determinadas como pueden ser: la gestión del estrés y la tristeza o la respuesta a estas preguntas:

  • ¿Quién soy realmente?
  • ¿Qué es el amor?
  • ¿Cómo tener más libertad?

Aunque parezca complicada de entrada es muy simple de formulación:

Nadie da lo que no tiene y para dar amor tengo que tener amor, y aquí el amor a uno mismo generando una sana autoestima se logra con un conocimiento profundo de uno mismo en el que Mindfulness nos ayuda de manera decisiva.

La libertad que van a encontrar en su interior les empodera para afrontar cualquier reto. Y esa libertad se logra practicando técnicas de Mindfulness.

La base del autoconocimiento en el desarrollo personal es una asignatura básica e imprescindible para lograr una relación sana con el ego y vivir desde el Ser, la entidad ontológica estudiada por la Filosofía y desde la que se construye el observador desapegado que ayuda a consolidar la práctica de Mindfulness.

En el estrés y la tristeza las ventajas del Mindfulness están reputadas científicamente. Pero estas experiencias vitales suelen ser personales y no grupales.

La ECONOMÍA DE LA ATENCIÓN de esta manera enfocada para los adolescentes tiene que ver con su libertad, el Amor y el encuentro personal con lo que soy y quiero ser.

Todo muy bonito sobre el papel, pero hay que pasar a la acción y es necesario organizarse para lograr metas y objetivos.

Organizaciones públicas y privadas, asociaciones, entidades, colegios, grupos de padres…Todos aquellos que quieran hacer por los adolescentes una aportación educativa en el sentido indicado pueden organizar eventos, como encuentros, campamentos y viajes donde el grupo se vea reconocido y la práctica del Mindfulness sea una experiencia vivida en comunidad, donde, además, los efectos de las neuronas espejo y la interacción de los campos energéticos que se generan son muy eficaces para lograr memorias y recuerdos que faciliten en el futuro la práctica individual y personal.

Mindfulness no es simplemente sentarse a meditar. Quien lo ha estudiado lo sabe perfectamente. Es un conjunto de hábitos que hay que ir incardinado poco a poco en nuestras vidas. Y para eso, el ejemplo es la mejor pedagogía. En este sentido, padres, madres y educadores, figuras de referencia educativa tienen que ser un ejemplo de vida Mindfulness, tienen que ser partidarios de la Economía de Atención.

En este sentido serán los adultos los que tengan que dar el primer paso y practicar las herramientas. Así como nos ven consumir alcohol y fumar con toda normalidad, de la misma manera que muchos juegan al fútbol y lo ven por la televisión o les enseñamos a practicar nuestra afición favorita, sea coleccionar sellos o ser corredor de maratón…Así también tenemos que hacer con el Mindfulness. El ejemplo es básico.

Para ello tener una práctica rutinaria y doméstica de los principales ejercicios, es decir, no tanto que sepan que vamos al dojo a practicar meditación, como que tengamos en casa un rincón donde la practicamos, donde nos sentamos o tumbamos para realizar algún ejercicio, que nos vean caminar, comer y alimentarnos de manera consciente, con atención plena, es decir, ser un vivo ejemplo de lo que quiero transmitir.

Dicen en Zen que el Maestro llega cuando el alumno está preparado. Paciencia. Serenidad, Todo llegará. Es importante no forzar, ni agobiar, sino proponer y dialogar. Explicar lo que hacemos y para qué lo hacemos a los adolescentes les integra en sus expectativas la posibilidad de que ellos también puedan beneficiarse de lo que ven que tanto bien les hace a los que lo practican.

Vamos concluyendo y resumiendo…

Constituirse en ejemplo, organizarse para que puedan vivir experiencias y facilitar el acceso a programas educativos y formativos de Mindfulness para toda la pandilla. Desde el amor que les tenemos y el amor que somos. Es decir poniendo fe y esperanza en que mis pasos serán un buen territorio que transitar por quien me preceda.

La Economía de la Atención no ha hecho más que aterrizar en España, llevamos pocos años en relación con otros países y continentes. Ha venido para quedarse para aumentar el bienestar de nuestras vidas. Y es que, no sólo de pan vive el hombre.

Autor

Visionario, escritor, consultor y conferenciante. Humanista apasionado por la tecnología, la innovación y la sostenibilidad. Defensor del pensamiento crítico. Especializado en Cripto Economía y Legal Tech. Analista Empresarial y Asesor en Estrategias de Innovación basadas en Criptoeconomia, O.D.S. Agenda 2030. Abogado.