Si alguno de mis lectores/as se pregunta qué es lo que más me guía en la vida, mi respuesta es clara: una mejor convivencia entre las personas. Y esto es posible, pero más aún, necesario, para hacer una sociedad más humana…también organizaciones mucho más sensibles a las personas.
Tenemos que recordarnos cada día que somos personas que compartimos decenas de miles de momentos con otras personas. Que las relaciones interpersonales crecen y se fortifican cuando todos tenemos una visión más humana de nuestro entorno compartido. Porque mirar más allá de un día no lo podemos hacer solos, sino acompañados y compartiendo hechos, trabajos, responsabilidades y también momentos de ocio.
Formando parte de un equipo o dirigiendo una organización. Da igual: La cuestión es sentirnos como la esencia que mueve el mundo, ya que las decisiones las tomamos personas no máquinas, aún, sabiendo la gran ayuda que éstas nos aportan, en la medida que no perdamos el punto de vista del factor humano, preservaremos nuestra especie y capacidad de convivir digna y pacíficamente en nuestro hogar común: la Tierra.