Dos

- en Firmas
Lourdes Francés
Tener tantas cosas que decirse
y sin embargo callar,
para no romper ese instante
mágico
que dura ya
una eternidad.
Sostener su mirada,
insinuar una sonrisa
de aceptación y entrega,
sin miedos
ante el mañana incierto,
pues todo en la vida
está abierto
a lo que pueda pasar.
Compartir lecho,
comida y paseo,
sintiéndose
al albur del deseo,
mientras sus dedos
sellan la herida abierta
de soledad.
Cuando el amor nos alcanza
de poco vale templanza,
sosiego ni castidad,
porque su fuego
consume y nos devasta
alma y cuerpo
sin piedad.

Autor

Cirujana Ortopédica y traumatóloga. Runner popular.