- “La falta de médicos en el medio rural provoca que los farmacéuticos se conviertan en la única referencia sanitaria continua en muchos de nuestros pueblos”, aseguran los socialistas
El PSOE de Salamanca muestra su “firme apoyo” a los farmacéuticos y la sostenibilidad de las farmacias rurales en la provincia por su innegable importancia como “servicio básico de carácter social y sanitario”.
Así se lo ha transmitido una delegación de la dirección provincial del PSOE de Salamanca encabezada por el secretario general, David Serrada, junto al secretario de política municipal, Fernando Rubio, y la secretaria de política social, Elena García, a representantes de la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Salamanca en un encuentro de trabajo mantenido hoy en la sede del partido socialista
En la provincia de Salamanca hay 255 farmacias y 92 botiquines que dan empleo a cerca de 1.000 personas y la reunión ha servido principalmente, entre otras muchas cuestiones, para abordar la forma de asegurar la sostenibilidad económica de las farmacias rurales. “No podemos seguir siendo la provincia que más farmacias tiene en situación de viabilidad económica comprometida de Castilla y León, 42 de las 255 se encuentra en esta situación”, ha explicado el líder de los socialistas salmantinos, David Serrada, “y ni la Diputación de Salamanca ni la Junta de Castilla y León pueden seguir mirando para otro lado como si no pasara nada”.
A día de hoy, “los vecinos están preocupados por las dificultades para comprar medicamentos en situaciones de urgencia”. Una preocupación que los socialistas han trasladado al Colegio de Farmacéuticos con el objetivo de buscar soluciones a este problema de forma conjunta. Sobre esta cuestión, se ha consensuado y debatido sobre la implementación de medidas e iniciativas para buscar la mejora de un sector tan importante en las zonas rurales.
A la hora de afrontar estas cuestiones ambas partes han convenido que las farmacias son establecimientos privados “pero con un innegable interés público”. Un sector autorregulado, con una normativa que no responde en la actualidad a la problemática que comienzan a sufrir con cada vez más fuerza los farmacéuticos situados en el medio rural, y que ven como las condiciones establecidas para compensar el efecto de tener dicho negocio en el medio rural se quedan cortas y, por tanto, hacen peligrar la viabilidad de sus establecimientos.
Ambas delegaciones han coincidido en que esta problemática se está dando con mayor incidencia en comunidades y provincias como la nuestra, «donde la despoblación es una lacra». Según datos aportados por el Consejo de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Castilla y León, el 62% de las farmacias se sitúan en el medio rural, de las cuales, el 47% tienen sede en municipios de más de 2.000 habitantes, el 39% en pueblos de menos de 1.000 habitantes y el 25% en localidades con una población inferior a los 500 habitantes.
“Mantener la red de farmacias actual como mínimo en nuestra tierra, especialmente en el medio rural, debe ser una prioridad que desde las administraciones implicadas se debe afrontar”, ha indicado Serrada, algo en lo que han estado de acuerdo todos los presentes en la reunión tras hacer hincapié en la necesidad de modificar el marco regulatorio del propio sector.
Tanto socialistas como representantes farmacéuticos han coincidido en entender y definir que la farmacia es mucho más que un simple establecimiento comercial en cualquiera de los municipios de la provincia, “en su mayoría muy por debajo de los 500 habitantes” y la importancia que tiene para todos ellos el servicio “imprescindible” que están prestando. Su labor, han convenido, va mucho más allá que el mero suministro de medicamentos a una población que, por su general envejecimiento, precisa de los mismos con relativa frecuencia.
Un hecho que ha supuesto, han añadido desde las filas socialistas, en la mayoría de los casos, “que la prestación se convierta, de manera frecuente, en una atención personalizada a esa población con el seguimiento personalizado de sus dolencias y enfermedades más allá de la atención en el consultorio médico”. Y todo ello porque la atención médica, han concluido desde el partido socialista, “está amenazada e incluso aniquilada en muchas zonas, comarcas, y pueblos de nuestra provincia por la reforma sanitaria que pretende impulsar e instaurar el gobierno de la Junta y su presidente Mañueco”.
