Poema «Nunca morirás para mí»

- en Firmas

Nunca morirás para mí,
entre lágrimas le susurro.
Su niña tumbada en la carretera,
con su mirada se despidió.

Jamás había amado tanto,
como a ella, su bella flor.
Beso lentamente sus labios,
de nuevo se enamoró.

Nunca morirás para mí,
afligido y en silencio sollozo.
Serás tú mi bella durmiente,
la niña que fiel amo yo.

Acarició suave su rostro,
le dijo: eres tú mi gran amor.
Ambos entrelazaron sus dedos,
miraron la luz sin temor.

Nunca morirás para mí,
llorando le repitió.
Clavó un puñal en su pecho,
con su princesa partió.

Autor

Almudena Merino nació en Barcelona. Sin embargo, reside actualmente en Salamanca, ciudad que la vio nacer como escritora. A pesar de su corta andadura literaria, la avalan varios títulos publicados: Reflejos de una sonrisa, Secretos de un alma callada y El escondite de una Rosa.